Lía Truglio

LÍA TRUGLIO
(Luján de Cuyo-Mendoza)

ACERCA DE LOS NAUFRAGIOS

El agua se retiró y yacen
cadáveres amontonados sobre la arena ,
descendientes de las honduras ,
del abismo verde de sal y yodo
que los expulsa del paraíso.
Este es el lugar donde los caracoles se despedazan
y las algas descansan su desconcierto
Estos son los hijos descastados y sin nombre
que la marea dejó sobre la playa,
los que se creían inmortales en el mar
y hoy son sus desheredados .
La luz no perdona
y devuelve las imágenes del caos
de estos náufragos perplejos
prohibidos ahora del reino
Un pez me mira con su ojo de hielo seco
y me sonríe.
El mar como un deudo borracho
continúa cantando
sin enterrar a sus muertos.
Del libro Apuntes de París


V

alguien , me cierra la calle con una melodía
que se envuelve sobre la luz de las farolas
es la hora de la sangre detenida
capitulando en el pulso de la tarde
la hora del beso
que apaga la luz de las marquesinas
y deja el tiempo austero del silencio

un caminante camina las baldosas mojadas
que reflejan les Champs Elysées

soy yo que he escapado a la niebla
y vuelvo a retomar el paso, después de un siglo de melodías
envueltas en la media luz de las farolas

y la vida camina conmigo.


VI

llueve
en las viejas veredas, el estigma del agua
traza caminos pálidos

sobre el Sena, los goterones ,
abren enormes ojos sin pupilas

cierro el paraguas a contra cara de la lluvia
y trato de confundirme en los hilos prolijos
de sus nudos densos
este cielo
me ha estado esperando para asombrarme
el agua iniciática y bautismal
lava el recuerdo de cualquier otra agua

como si fuera mi primera lluvia.


VII

desde el puente
un abismo de signos y sonidos
se estrellan contra las piedras
indiferente el río ata el agua a su caudal oscuro
mariposas bastardas
elevan su des tino que se consume
en un cielo que se incendia
y son tan frágiles , tan de seda sus alas
tan dolorosamente oscuras
como un aviso de muerte
cuando a su alrededor , estalla la vida